THE BASIC PRINCIPLES OF PODER DE LA PALABRA

The Basic Principles Of poder de la palabra

The Basic Principles Of poder de la palabra

Blog Article

Además, debemos ser conscientes de cómo nuestras palabras pueden afectar nuestra propia vida. En Proverbios twelve:eighteen leemos: «Hay quienes hablan como quien hiere con espada, pero la lengua de los sabios sana».

Es importante que aprendamos a declarar palabras de fe y confianza en Dios, en lugar de permitir que palabras negativas y derrotistas dominen nuestra vida. Debemos creer que lo que decimos tiene el poder de manifestarse, siempre basados en la voluntad de Dios y en línea con Su Palabra.

Nuestras palabras tienen un gran poder y pueden tener un impacto significativo en las personas que nos rodean. Debemos ser conscientes de cómo las usamos y buscar formas de edificar y animar a los demás. Además, debemos ser sabios al hablar, escuchar antes de responder y controlar nuestras emociones.

Si dices NO quieres tener sobrepeso, la imagen que viene a tú mente eres tú con sobrepeso y partiendo de la premisa te conviertes en lo que piensas seguirás manteniendo el mismo peso que imaginas.

Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

Esto nos muestra que nuestras palabras deben ser un medio de aliento y apoyo para los demás, y no una fuente de crítica o negatividad.

En el libro clásico de Robert Kiyosaki Padre Rico Padre Pobre, explica que en un momento de su vida se dio cuenta de que las personas realmente van creando sus vidas por medio de sus palabras.

Aunque hoy en día la palabra no tiene tanto peso como antes, cuando con una palabra se cerraba un trato, el hecho de que una persona diga una cosa y haga otra debilita su carácter. El daño no se create a la persona que se engaña con una mentira, se generate en la persona que dice la mentira.

Por ejemplo, cuando digo “soy vago para estudiar”, o “nunca voy a llegar al peso que quiero” no estoy describiendo una situación, sino declarando una condena y generando mi realidad en base a esta afirmación.

Otra forma de usar nuestras palabras de manera constructiva es practicar la empatía. En Efesios 4:29, se nos insta a «no decir ninguna palabra mala, sino sólo la que sea necesaria para edificar, según la necesidad del momento, para que imparta gracia a los que escuchan».

Cuando hablamos de lo que somos o planteamos afirmaciones absolutistas como “nunca” o “siempre”, hacemos referencia a un producto acabado y, siendo consciente o no, estamos predisponiendo a nuestra mente para continuar actuando de la misma manera.

Si quieres cambiar tu entorno una de las formas más sencillas de conseguirlo es aumentando tu more info vocabulario. Las personas se asocian con otras personas que manejan su mismo vocabulario.

El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.

Como seguidores de Cristo, debemos ser conscientes del poder de nuestras palabras y usarlas sabiamente, para traer vida y bendición a los demás y para glorificar a Dios.

Report this page